La he tenido aparcada hasta que un día se me encendió la bombilla. Me viene estupendamente para llevar la ropa que saco de la lavadora para tender. Así que le correspondía una decoración muy básica y sencilla.
Un trozo de tela (rematada en los bordes con la máquina de coser), transfer para las letras y decorada en las cuatro esquinas con unas perlitas de scrap que me regaló Cami (aquí podéis ver las preciosidades que hace). A las perlitas les apliqué un poco de betún de judea para que cogieran ese color dorado-cobre.
Y ya está. Como os decía, algo sencillo.
María la cesta ya era preciosa sin decorar y decorada esta divina.
ResponderEliminarbesitos.
Es monísima, ne encanta. Las cestas son mi debilidad. Besitos.
ResponderEliminarMaría que sencilla y a la vez que preciosísima te ha quedado.
ResponderEliminarUn abrazo
Una de mis máximas en muchas ocasiones......¡¡Menos es más!!. Te ha quedado realmente bonita. Y el transfer está de lujo. Esa cesta no necesitaba mucho más.
ResponderEliminarBesos, wapa!!.
Una cesta preciosa y tu le has dado el toque elegante.
ResponderEliminarBesitos guapa
Maria la verdad es que es bonita porque la has decorado lo justo...y dejando que la cesta siga siendo una cosa sencilla pero bella...
ResponderEliminarun abrazo
Sencilla , bonita, elegante.....
ResponderEliminarme encanta!
Qué cambio con tan poco !!! ....bueno, y con esas manos por supuesto!!!
ResponderEliminarBesos
Guauuuuuuuu....qué maravilla de cesta!!!
ResponderEliminarMe encanta lo que haces.
Besitos