Un té afrutado

¿Os acordáis de las cajas de té que os enseñé hace unos días? Pues gustaron mucho.
Y además de gustar me encargaron otra.

La condición: tenía que emplear el color naranja como color principal.
Y el resto era a mi elección. Y lo tuve claro.

Directamente me fui a por una servilleta de mi amiga Ross, a por una plantilla de topos y al color blanco algodón.
En principio iba con idea de craquelar la servilleta, pero después de ver el resultado de la caja decidí dejarla así. La verdad es que tal como estaba ya quedaba preciosa, y no quería restar protagonismo a esa servilleta, que es una auténtica maravilla.

Para el interior preparé unos separadores con cartón gris, que pinté del mismo tono naranja que el exterior y barnicé. Hice decoupage con unos trozos de la servilleta e hice transfer.
Pegué un tirador que pinté con los mismos tonos de la caja. Y éste es el resultado: una caja elegante y alegre. Por lo menos a mí me lo parece, no? :-)